La dorada es un pez perteneciente a la familia de los espáridos. A esta familia también pertenecen otros peces muy conocidos como son el sargo, la mojarra, la herrera, el pargo, la breca y la salema entre otros. Su nombre científico es Sparus aurata, pero comúnmente se le llama dorada, cabezona o zapatilla.
LOCALIZACIÓN DE LA DORADA
La dorada (Sparus aurata) se presenta en aguas poco profundas tanto de fondos arenosos como de roca, en las costas del océano Atlántico, desde las islas británicas, pasando por el estrecho de Gibraltar, hasta Cabo Verde; incluyendo todo el litoral de las Islas Canarias.
También se encuentra en el Mediterráneo, donde debido a sus cálidas temperaturas puede presentarse todo el año. Finalmente y en menor abundancia la encontramos en la costa occidental del Mar Negro y Mar Rojo.
MORFOLOGÍA DE LA DORADA
Las doradas tienen un cuerpo ovalado comprimido y alargado hacia la cola, la cual al ser grande, ancha y potente le permite moverse velozmente alternando potencia y sacudidas muy bruscas.
El cuerpo está recubierto de escamas muy grandes y visibles, mientras que los ojos son pequeños. Presenta una cabeza maciza y la boca, baja, cuenta con labios carnosos y mandíbulas poderosas.
Es de color gris con reflejos plateados y, si el dorso presenta reflejos azul dorado, el vientre tiende a claro. El nombre de dorada le viene de la mancha dorada que en el hocico une los ojos a otra mancha, negra. Y tiene también una mancha roja, cuya intensidad varía de un ejemplar a otro, a la altura del opérculo, cerca de las aletas pectorales.
Las doradas de piscifactorías se diferencian de las salvajes por tener una coloración más apagada, así como las carnes más grasientas, blandas y mucho menos sabrosas debido a la alimentación a base de piensos y al sedentarismo a las que se hayan sometidas.
REPRODUCCIÓN dE LA DORADA
La dorada puede alcanzar unos 70 cm de longitud y un peso que en algunos casos puede superar los 8 kg. El peso de la dorada está estrechamente relacionado con su sexo, ya que la dorada es un pez hermafrodita; es decir, que nace macho para después transformarse en hembra a la edad de 2 años.
Aproximadamente 500g de peso es el umbral más allá del cual la dorada pasa a ser de sexo femenino. Esto explica por qué los ejemplares que superan los 30 ó 40 cm son todos, salvo rarísimas excepciones, hembras.
ACTIVIDAD DE LA DORADA
La dorada es un pez cuya actividad principal es diurna y es más activa con buen tiempo. Por eso desaparece si se presentan bajas presiones, tiempo nublado y fuertes vientos.
Dado que la dorada suele llevar a cabo su reproducción entre los meses de septiembre hasta mediados de diciembre, durante este tiempo estarán también muy activas durante la noche.
La época del año más favorable para la pesca de la dorada es entre primavera y otoño, ya que en invierno se aleja mar adentro buscando profundidades de hasta 50 m, donde se reúne en grupos. La dorada es un pez sensible al frío, por lo que difícilmente baja a profundidades mayores.
La temperatura óptima del agua para la pesca de la dorada oscila entre los 20 ó 22 grados. Si la temperatura del agua baja de 15 grados daremos por terminada nuestra temporada de pesca de la dorada.
Las doradas adultas de gran tamaño se vuelven más solitarias, por lo que son más difíciles de localizar.
ALIMENTACIÓN DE LA DORADA
La dorada posee una dentadura importante, por medio de la cuál llega a alimentarse de almejas, navajas, ostras y mejillones, de los cuales tritura directamente la concha para comerse la carne del interior.
Precisamente gracias a su dentadura puede permitirse el lujo de variar continuamente su alimentación, que de todas formas es siempre esencialmente carnívora. Se alimenta preferentemente de moluscos, como acabamos de decir, así como de peces de pequeño tamaño, tipo sardinas o pequeños pulpos. Excepcionalmente en épocas de escasez también puede alimentarse de algas y plantas marinas.
Conoce a continuación las técnicas de pesca de la dorada.